CASTILLOS


CASTILLOS, dormir con la historia


Una fortaleza militar es el escenario de este hotel tan singular como su enclave. Rodeado de un patrimonio natural de reserva marina y de aves, en una de las zonas más privadas de Mallorca.
Un paraíso terrenal donde descansar rodeados de colores arenas, blancos y azules marinos que conforman un conjunto sereno y armónico.
El hotel cuenta con una piscina abrigada con los muros de la fortaleza y abierta al mar haciendo que mientras nadas se sus aguas se confundan con el mar. El antiguo embarcadero ha sido habilitado para tener zonas exclusivas de acceso al mar y así poder disfrutar de un baño en plena reserva natural.
Las habitaciones y suites se reparten por la fortaleza en varias zonas, destacando la suite cabo que dispone de piscina privada y terrazas, una privacidad a prueba de miradas para los celosos de su intimidad.
La gastronomía es otro pilar importante en Cap Rocat, ofreciéndo varios espacios tanto al borde del mar como en las antiguas cocinas para degustar la comida local y un buen vino.

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